El pasado 29 de diciembre de 2021 fue publicada en el BOE la Ley 20/2021, de 28 de diciembre, de medidas urgentes para la reducción de la temporalidad en el empleo público. Como ya indicamos en su momento nos parecía que la ley era insuficiente y no cumplía con la Directiva Europea 1999/70/CE. Teníamos sin embargo claro que las novedades de la ley mejoraban cualquier proceso selectivo de los propuestos hasta ese momento por el SESCAM y después de todo, la ley está para cumplirla. ¿Lo saben esto todos los implicados?
Ya en enero nos concentramos como hacemos hoy para pedir su correcta aplicación en el Servicio de Salud castellano manchego, temiendo que no se hiciera bien ni en tiempo. No nos equivocamos y nos encontramos aquí de nuevo, escribiendo un capítulo más en este particular libro de los horrores de los y las trabajadoras temporales.
Antes de comenzar a analizar lo sucedido debemos recordar que la nueva ley establece procesos de estabilización para las plazas que sean estructurales y cuenten con dotación presupuestaria (estén o no en plantilla), siempre que no hayan sido convocadas o que habiéndose convocado no se hayan cubierto. Asimismo, distingue entre dos procesos selectivos: uno para las plazas ocupadas durante más de tres años, en las que desaparecería la fase eliminatoria del concurso-oposición y otro para las plazas ocupadas durante más de cinco años, a las que se podría acceder solo por concurso de méritos. En ambos casos, habría una indemnización al cese de 20 días por año trabajado para aquellas personas que no superasen el proceso selectivo.
El trámite de negociación colectiva que ha seguido esta ley en nuestra región y que presumiblemente acabará hoy con el acuerdo del Consejo de Gobierno es digno de ser analizado. La mesa sectorial de sanidad comenzó con un borrador en el que el Director de RRHH, D. Iñigo Cortázar, no contemplaba cumplir con lo planteado en las adicionales sexta y octava de la ley y dejaba en blanco el borrador de plazas que se ofertaron para el concurso de méritos puro. Es decir, se decidió no cumplir con la ley. Y lo más grave es que la mayoría de los sindicatos presentes en la mesa votaron a favor de dicha propuesta, dándolo por bueno y convirtiéndose en cómplices de ese atropello. Tan sólo Usicam y CSIF tuvieron la decencia de votar en contra en la mesa sectorial. El CESM se dejó “liar” con un proceso ilegal de concurso de méritos para 2023 y lo anunciaron con júbilo a bombo y platillo. Entre vergonzoso y delirante.
El evento más extraño llegó horas antes de la celebración de la mesa general, cuando por sorpresa y suponemos que por la presión que se hizo desde Solidaridada Obrera, CSIF y Usicam el director de RRHH anuncia que modifica lo pactado en mesa sectorial para ofertar gran parte de las plazas aprobadas por concurso de méritos. Todo muy democrático y muy coherente con el respeto de la libertad sindical. Consiguió, eso sí, evitar por el momento la denuncia por presunta prevaricación.
La mesa general no fue mucho mejor, estuvimos presentes en ella y pudimos asistir al bochornoso papel de los sindicatos más representativos, que a pesar de denunciar que faltaban plazas y categorías votaron finalmente todos a favor, menos FSES (ANPE y SATSE) que se abstuvo y la Intersindical (la cual nos había invitado como asesores para el sector de sanidad) que votó en contra y pidió la dimisión del responsable de Función Pública. Esta es la chapuza de negociación a la que se ha sometido la Ley 20/2021 en Castilla-La Mancha, con la guinda puesta por el sector de sanidad, en la que ni se han presentado listados, ni criterios y se ha modificado la oferta con prisas para evitar denuncias y hacer el ridículo frente al resto de administraciones regionales.
Este sindicato y los afectados no entienden que se pueda vulnerar los derechos generados por la nueva ley, que está hecha precisamente para solucionar el problema de personas en interinidades excesivamente largas y posiblemente en fraude de ley (el preámbulo de la ley no deja lugar a dudas). No podemos dar por buena una oferta que deja atrás a categorías enteras o deja de ofertar grandes cantidades de plazas en otras. Somos personas, no números ni plazas. No nos merecemos una administración que lejos de hacer cumplir la ley y gestionar de la mejor manera sus recursos nos sorprende con falta de transparencia, improvisación y falta de rigor. Es por esto que desde aquí pedimos el cese inmediato del director de RRHH del SESCAM, D. Iñigo Cortázar.
Ya avisamos que si no se cumplía con la ley nos veríamos obligados a hacer un llamamiento a la huelga indefinida de TODO el personal del Servicio de Salud, sin importar su categoría ni su tipo de nombramiento. La defensa de los trabajadores temporales también importa a los trabajadores fijos, sobre todo a aquellos que defienden que no puede permitirse que una administración pública haga un uso abusivo de la temporalidad en su personal, pues va en detrimento de la calidad asistencial, abre la puerta a la privatización y pone en riesgo nuestro sistema sanitario público. Nos ponemos desde hoy mismo a trabajar en esa convocatoria y animamos a los colectivos afectados a ponerse en contacto con nosotras. También anunciamos que iniciaremos todas las medidas legales a nuestro alcance y ponemos a disposición de todas las personas trabajadoras del SESCAM nuestros humildes recursos para ayudarles a exigir justicia en los tribunales.
Ayer mismo se pidió una reunión de urgencia con Jesús Fernández Sanz, consejero de Sanidad del Gobierno de la Junta de Castilla-La Mancha, para intentar frenar esta locura y evitar males mayores tanto para la propia administración como para sus trabajadores y usuarios. La litigiosidad va a ser enorme y las consecuencias desastrosas para la sanidad castellano manchega. Esperamos atienda a nuestra petición y nos reunamos pronto.
POR UNA CORRECTA APLICACIÓN DE LA LEY 20/2021, POR UNA ADMINISTRACIÓN QUE CUIDE DE LAS PERSONAS QUE TRABAJAMOS EN ELLA, ¡L@S QUE ESTÁN SE QUEDÁN!
Solidaridad Obrera SESCAM 